Líbia
Independentemente do regime, e da personalidade de Kadafi- e nós não esquecemos, por exemplo, que no 25 de Abril ele apoiou o separatismo na Madeira e nos Açores- o que está em causa para Obama, Clinton,Sarkozi, Merkel,D Cameron,não são os direitos humanos,nem a sorte do povo líbio,mas o petróleo! A desinformação e a criação de uma opinião pública favorável á ingerência e a uma intervenção é evidente.Tal como no Iraque até já falam de armas químicas e de destruição maciça... Veja-se também o caso dos bombardeamentos aéreos repetidamente notíciados e que o embaixador português na Líbia ,talvez por ainda não estar sintonizado, desmentiu no dia seguinte na "antena 1"...
Opiniões
(...)Es evidente que dentro de Libia se desarrolla una guerra civil.
¿Por qué y cómo se desató la misma? ¿Quiénes pagarán las consecuencias?
La agencia Reuters, haciéndose eco del criterio de un conocido banco de Japón, el Nomura, expresó que el precio del petróleo podría sobrepasar cualquier límite:
«Si Libia y Argelia suspenden la producción petrolera, los precios podrían llegar a un máximo por encima de 220 dólares por barril y la capacidad ociosa de la OPEP sería reducida a 2,1 millones de barriles por día, similar a los niveles vistos durante la guerra del Golfo y cuando los valores tocaron los 147 dólares por barril en el 2008’, aseveró el banco en una nota».
¿Quiénes podrían pagar hoy ese precio? ¿Cuáles serían las consecuencias en medio de la crisis alimentaria?
Los líderes principales de la OTAN están exaltados. El Primer Ministro británico, David Cameron, informó [la agencia de noticias italiana] ANSA, «…admitió en un discurso en Kuwait que los países occidentales se equivocaron en apoyar gobiernos no democráticos en el mundo árabe.» Se le debe felicitar por la franqueza.
Su colega francés Nicolás Sarkozy declaró: «La prolongada represión brutal y sangrienta de la población civil libia es repugnante».
El canciller italiano [neo-facista ndlr] Franco Frattini declaró «creíble’ la cifra de mil muertos en Trípoli […] ‘la cifra trágica será un baño de sangre’».
Hillary Clinton declaró: «…el ‘baño de sangre’ es ‘completamente inaceptable’ y ‘tiene que parar’…»
Ban Ki-moon habló: «Es absolutamente inaceptable el uso de la violencia que hay en el país’».
«…‘el Consejo de Seguridad actuará de acuerdo a lo que decida la comunidad internacional’.»
«Estamos considerando una serie de opciones».
Lo que Ban Ki-moon espera realmente es que Obama diga la última palabra.
El Presidente de Estados Unidos habló en la tarde de este miércoles y expresó que la Secretaria de Estado saldría para Europa a fin de acordar con sus aliados de la OTAN las medidas a tomar. En su cara se apreciaba la oportunidad de lidiar con el senador de la extrema derecha de los republicanos John McCain; el senador pro israelita de Connecticut, Joseph Lieberman y los líderes del Tea Party, para garantizar su postulación por el partido demócrata.
Los medios masivos del imperio han preparado el terreno para actuar. Nada tendría de extraño la intervención militar en Libia, con lo cual, además, garantizaría a Europa los casi dos millones de barriles diarios de petróleo ligero, si antes no ocurren sucesos que pongan fin a la jefatura o la vida de Gaddafi.
De cualquier forma, el papel de Obama es bastante complicado.
¿Cuál será la reacción del mundo árabe y musulmán si la sangre en ese país se derrama en abundancia con esa aventura?
¿Detendrá una intervención de la OTAN en Libia la ola revolucionaria desatada en Egipto?
En Iraq se derramó la sangre inocente de más de un millón de ciudadanos árabes, cuando el país fue invadido con falsos pretextos. ¡Misión cumplida! proclamó George W. Bush.
Nadie en el mundo estará nunca de acuerdo con la muerte de civiles indefensos en Libia o cualquier otra parte. Y me pregunto: ¿aplicarán Estados Unidos y la OTAN ese principio a los civiles indefensos que los aviones sin piloto yankis y los soldados de esa organización matan todos los días en Afganistán y Pakistán?
Es una danza macabra de cinismo.
Fidel Castro Ruz
Febrero 23 de 2011
THE NATO PLAN IS TO OCCUPY LIBYA
Oil has become the principal wealth in the hands of the great Yankee transnationals; through this energy source they had an instrument that considerably expanded their political power in the world. It was their main weapon when they decided to easily liquidate the Cuban Revolution as soon as the first just and sovereign laws were passed in our Homeland: depriving it of oil.
Upon this energy source today’s civilization was developed. Venezuela was the nation in this hemisphere that paid the highest price. The United States became the lord and master of the huge oil fields that Mother Nature had bestowed upon that sister country. (...)
One can agree with Gaddafi or not. The world has been invaded with all kinds of news, especially using the mass media. One has to wait the necessary length of time in order to learn precisely what is the truth and what are lies, or a mixture of events of every kind that, in the midst of chaos, were produced in Libya. For me, what is absolutely clear is that the government of the United States is not in the least worried about peace in Libya and it will not hesitate in giving NATO the order to invade that rich country, perhaps in a matter of hours or a few short days.
Those who with perfidious intentions invented the lie that Gaddafi was headed for Venezuela, just as they did yesterday afternoon on Sunday the 20th of February, today received an fitting response from Foreign Affairs Minister Nicolás Maduro when he literally stated that he was “wishing that the Libyan people would find, in the exercise of their sovereignty, a peaceful solution to their difficulties, that would preserve the integrity of the Libyan people and nation, without the interference of imperialism...”
As for me, I cannot imagine that the Libyan leader would abandon his country; escaping the responsibilities he is charged with, whether or not they are partially or totally false.
An honest person shall always be against any injustice being committed against any people in the world, and the worst of all, at this moment, would be to remain silent in the face of the crime that NATO is getting ready to commit against the Libyan people.
The leadership of that war-mongering organization has to do it. We must condemn it!
Fidel Castro Ruz
February 21, 2011
Outra opinião
(...)
Gracias a sus ricas reservas de petróleo y gas natural, Libia tiene una balanza comercial positiva de 27.000 millones de dólares al año y un ingreso per cápita medianamente elevado de 12.000 dólares, seis veces mayor que el de Egipto. A pesar de fuertes diferencias en los ingresos bajos y altos, el nivel de vida promedio de la población de Libia (sólo 6,5 millones de habitantes en comparación con los casi 85 millones de Egipto) es por lo tanto mayor que el de Egipto y otros países norteafricanos. Lo muestra el hecho de que casi un millón y medio de inmigrantes, sobre todo del norte de África, trabajan en Libia. Cerca de un 85% de las exportaciones libias de energía van a Europa: Italia tiene el primer lugar con un 37%, seguida por Alemania, Francia y China. Italia también ocupa el primer lugar en importaciones de Libia, seguida por China, Turquía y Alemania.
Este marco ahora revienta como resultado de lo que se puede caracterizar no como una revuelta de masas empobrecidas, como las rebeliones en Egipto y Túnez, sino como una verdadera guerra civil, debida a una división del grupo gobernante. Quienquiera que diese el primer paso ha explotado el descontento contra el clan de Gadafi, que prevalece sobre todo entre las poblaciones de Cirenaica y los jóvenes en las ciudades, en un momento en el cual todo el norte de África ha tomado el camino de la rebelión. A diferencia de Egipto y Túnez, sin embargo, el levantamiento libio se planificó y organizó con anterioridad.
Las reacciones en la arena internacional también son simbólicas. Pekín ha dicho que está extremadamente preocupado por los sucesos de Libia y llamó a “un rápido retorno a la estabilidad y la normalidad”. El motivo es obvio: el comercio chino-libio ha crecido considerablemente (cerca de un 30% sólo en 2010), pero ahora China puede ver que toda la estructura de las relaciones económicas con Libia, de donde importa cantidades crecientes de petróleo, se ha puesto en juego. Moscú se encuentra en una posición semejante.
Diametralmente opuesta es la señal de Washington: el presidente Barack Obama, que cuando se vio enfrentado a la crisis egipcia minimizó la represión desencadenada por Mubarak y llamó a una “transición ordenada y pacífica”, ha condenado rotundamente al gobierno libio y anunció que EE.UU. prepara “toda la gama de opciones que tenemos a nuestra disposición para responder a esta crisis, incluidas ‘acciones que ponemos emprender solos y otras que podemos coordinar con nuestros aliados a través de instituciones multilaterales’.” El mensaje es evidente: existe la posibilidad de una intervención militar de EE.UU. y la OTAN en Libia, oficialmente para detener el derramamiento de sangre. Las verdaderas razones son obvias: Si se derroca a Gadafi EE.UU. podría derribar todo el marco de las relaciones económicas con Libia y abrir el camino a las multinacionales basadas en EE.UU., que hasta ahora están casi totalmente excluidas de la explotación de reservas de energía en Libia. Por lo tanto, EE.UU. podría controlar el grifo de las fuentes de energía de las que depende en gran parte Europa y que también provee a China.
Estos son las apuestas en el gran juego de la división de los recursos africanos, por los que tiene lugar una creciente confrontación, en especial entre China y EE.UU. La creciente potencia asiática, con la presencia en África de cerca de 5 millones de gerentes, técnicos y trabajadores, construye industrias e infraestructuras a cambio de petróleo y otras materias primas. EE.UU., que no puede competir en ese terreno, puede utilizar su influencia sobre las fuerzas armadas de los países africanos importantes, que entrena mediante el Comando África (AFRICOM), su principal instrumento para la penetración del continente. La OTAN también entra ahora en el juego, ya que está a punto de concluir un tratado de cooperación militar con la Unión Africana que incluye a 53 países.
La central de la cooperación de la Unión Africana con la OTAN ya se está construyendo en Addis Abeba: una estructura moderna, financiada con 27 millones de euros de Alemania, bautizada: “Construyendo paz y seguridad”.
Il Manifesto, 25 de febrero de 2011
Traducido del italiano por John Catalinotto
Fuente: http://www.globalresearch.ca/index.php?context=va&aid=23413
Sem comentários:
Enviar um comentário